Recién regresé de mi estadía en Francia y he pensado en la cantidad de lugares que he visitado y que me faltaron por visitar. Como traductora y lingüista, me puse a reflexionar en la etimología o el origen de los nombres de los sitios que decimos en español y que en su idioma original cambian muchísimo.
Muchos de ellos, a través de los años, han sido "traducidos" o "castellanizados" por lo que tienen un equivalente en español. Sin embargo, el nombre que se les ha atribuido no precisamente significa lo mismo en español que en su idioma de origen.
Por eso te comparto dos de los que me parecieron más sorprendentes.
1. Brujas, Bélgica
De entrada, comienzo con esta ciudad que tiene un nombre bastante peculiar en español y el origen de la palabra no tiene nada que ver con lo que en español significa 'brujas'.
Su nombre se origina de la antigua palabra escandinava Brygga que significa puerto o lugar de amarre. Sin embargo, según otras fuentes, en flamenco/neerlandés, 'Brugge' significa "Puentes", lo que tiene mucho más sentido, tomando en cuenta que es una ciudad que por mucho tiempo fue una ciudad de comercio y está repleto de puertos y puentes. Más tarde cambió a su nombre a Brugge escrito en flamenco, uno de los idiomas oficiales de Bélgica.
Probablemente, el nombre fue cambiando al español "Brujas" según la adaptación fonética y no precisamente porque esa ciudad esté relacionada con brujas; no tiene nada de misteriosa y no está relacionada con personas que practican la brujería.
2. El Canal de la Mancha
Este en especial siempre llama la atención de las personas a las que les cuento sobre su nombre, ya que es un dato bastante perturbador el saber que se le llame el 'Canal de la Mancha' debido a una mala traducción del francés al español.
En el idioma francés, la Manche significa literalmente 'la manga'. Visto desde lejos y de un punto alto, tiene la forma de 'manga' de una prenda de vestir y no precisamente una mancha, que en francés se diría tache.
En español tendría más sentido que se le llame el Canal de la Manga. La verdad es que no se puede saber en qué momento a este canal se le comenzó a decir Canal de la Mancha y si fue en realidad el caso de una mala traducción o una adaptación fonética, ya que manche se parece mucho a la palabra mancha.
Lo cierto es que no se sabe con certeza cuándo fue que estos y otros sitios adquirieron estas traducciones "castellanizadas", y aunque su nombre original no tiene nada que ver con la traducción que se les asignó, ahora son aceptados en español y, por lo tanto, se seguirán usando así.
Si sabes de otras ciudades u otros topónimos que han sido cambiados al español, puedes compartírnoslos en los comentarios.
SOBRE MÍ
Pily Castillo
Soy una viajera empedernida a la que le fascina investigar datos curiosos sobre la historia universal y de los cambios lingüísticos de los idiomas, así como de los lugares que he visitado. Estuve viviendo en Francia por unos meses y eso me motivó a seguir investigando más sobre este idioma y la traducción en el mismo.
Dato curioso: Me gusta prepararme el té negro con leche.
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