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6 factores para demostrar a tu personaje

Cuando se trata de escribir, no hay una fórmula definitiva ni una serie estricta de pasos, ya que cada escritor encuentra su estilo y su camino en el proceso. Sin embargo, cuando se trata de dar a conocer a los personajes y mostrarlos, hay cinco factores imprescindibles que recomienda la escritora Silvia A. Kohan y uno que a mí me parece infalible.



1. Acciones

Este es el factor principal para evitar el infame error de describir en vez de mostrar. Un personaje se conoce a través de lo que hace, cómo lo hace y con qué actitud lo hace. Por ejemplo, no me cuentes que "Pricila era una mujer de mal carácter que se la pasaba los martes por la noche en el salón de belleza"; mejor escribe una escena donde esté en el salón de belleza y monte un show iracundo contra la empleada. Así nos haremos una profunda y mejor idea de su actuar.

Las acciones hablan más que las palabras.


2. Habla

Con habla me refiero al diálogo, uno de los elementos de la ficción que podemos usar para demostrar la cultura de los personajes, su origen, su condición social, sus estados de ánimo y hasta sus modales. Es un elemento imprescindible para dar a conocer un poco de los antecedentes del personaje. A través de los diálogos podemos percibir su actitud y esbozar sus acciones, sobre todo con los incisos (las acciones que se intercalan entre el parlamento) y los verbos dicendi (los que anexan la manera en la que se expresan: dijo, bramó, musitó, etc.).





—Ese vestido te queda muy bien —susurró Lisa con un rostro avinagrado—. Tanto que no deberías usarlo, o podría estropearse.

—Gracias por preocuparte, pero lo usaré toda la noche... Quiero que me vean; ahorré mucho para comprarlo —respondió su prima con dulzura. Luego la abrazó—. Gracias por acompañarme a la fiesta.


En el ejemplo anterior, se puede inferir que Lisa tiene envidia de su prima, y que su prima es tan ingenua que no lo nota.


3. Pensamiento

No hay que explicar demasiado. Con este factor, podemos conocer lo más profundo del personaje, incluso aquello que no se atreve a decirle a otros. La forma de expresar los pensamientos de tu personaje depende mucho de los tipos de narrador.



4. Apariencia

Este es un factor que varía según tu estilo de escritura, ya que escritores como Stephen King no le dedican mucha atención y aún así crean obras maestras. Sin embargo, es notablemente un arma que podemos usar para incluir rasgos opuestos del personaje (para saber más de ellos, haz clic aquí). Pensemos en Dolores Umbrige, el personaje de Harry Potter, una mujer maquinadora, manipuladora y cruel, que sin embargo, se viste con colores rosados chillones, algo que demuestra que ella se ve a sí misma como alguien bondadoso. La apariencia es capaz de mostrar rasgos psicológicos que dan profundidad a tu personaje.


5. Relaciones interpersonales

La mayoría de veces, nuestra vida social demuestra quiénes y cómo somos; en la ficción no es la excepción a la regla. Podemos reconocer a un personaje tímido al saber que tiene solo un amigo y sabemos que un padre es bueno de acuerdo a la relación con sus hijos. Asimismo, las características de los personajes que rodean al protagonista, pueden decir mucho de él.

Dime con quién andas y te diré quién eres.

6. Entorno

Este factor es el que yo agrego a la lista. Por entorno, no me refiero a la ciudad o al territorio en el que reside tu personaje, sino a su propio espacio. son esos pequeños detalles que dicen mucho de él. ¿Es organizado? ¿Es un desorden? ¿Tiene las ventanas abiertas o cerradas?

Adicional, se pueden incluir artefactos que nos hagan saber sus intereses, pasatiempos, entre otros.


Como pudiste leer, estos son solo seis factores fáciles de aplicar. Mientras los tengas en mente, será más sencillo no caer en el error de describir en vez de contar.


SOBRE EL AUTOR



Andrés Beltanien Instagram: @andresbeltanien

Andrés es amante de la literatura infantil, autoayuda y las novelas con dramas de señora. Le gusta escuchar a las personas, cocinar e ilustrar a los personajes de sus historias (puedes leer una de ellas aquí). Dato curiosos: Le fascina escuchar a las personas, y ser una oreja cuando se desahogan.

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